miércoles, 4 de agosto de 2010

Capítulo 5 - El mensaje del loco

Darío abrió los ojos al despertarse, vio una silueta que estaba cerca de ellos, se levanto corriendo y salio fuera de donde habían dormido.

-¿Quién hay ahí?, pregunto asustado Darío. Busco por los alrededores pero no encontró nada, cuando volvía vio en un suelo una pisada en el barro que no era ni de Vaga ni de Carol ni suya, era una pisada de un pie pequeño que probablemente podría ser de una mujer. Entro donde estaba durmiendo y vio que Carol, Vaga y Flag dormían tranquilamente. Se sentó donde había dormido se pudo a pensar en lo de la noche anterior.

-¿Qué nos quiso decir el loco?, pensó Darío.
-Nos quiso decir algo... ¿Pero el qué?, pensó Darío.

Empezó a decir el mensaje del loco de mil formas distintas pero no conseguía descubrir lo que les quería decir, al cabo de un rato se canso y se puso a mirar al cielo...

-A lo mejor no nos quiso decir nada y estoy haciendo el tonto, pensó Darío.
-Pero lo que vio Vaga en el cielo, ¿qué seria?, pensó Darío.
-Son tantas preguntas sin respuestas, no se nada de familia ni de mis amigos ni nada... ¿Seguirían vivos?, pensó Darío entre lagrimas.

Mientras que pensaba en miles de cosas Vaga empezó a moverse, hablar en sueños...

-Abuela enséñame a hacer lo que haces, decía Vaga en sueños.
-Joeee abuelaaaaa enséñame, decía Vaga como un niño pequeño en sueños.

Darío estaba impresionado con Vaga porque hablaba en sueños, fue hacia el para despertarle y le paro Carol.

-No, no le despiertes puede tener un ataque al corazón, dijo Carol.
-Pero... es que se le ve tan histérico, incluso parece que esta sufriendo, dijo Darío.
-Abuela como es posible que hables tan bien al revés enséñame por favor, dijo Vaga en sueños enrabietado.
-Parece un trauma infantil o algo parecido, dijo Carol.
-A lo mejor pero la mente es algo tan complejo..., dijo Darío.
-Sí, bueno voy a seguir durmiendo porque estoy cansadísima, dijo Carol.

Carol se volvió a dormir, Darío siguió escuchando a Vaga hablar en sueños un bueno rato hasta que se callo. Darío siguió pensando en el lo que dijo el loco... el no sabia porque pero sabían que era importante...

-No puedo sacar nada en claro de lo de ese loco, pensó Darío. De repente se levanto de donde estaba con una sonrisa.
-¡¡Ya lo tengo!! grito Darío.

Vaga, Carol y Flag se levantaron asustados, con cara de sorpresa.

-¿Qué pasa?, pregunto Vaga.
-Que gracias a ti se el mensaje del loco, dijo Darío.
-¿Gracias a mi?, pregunto Vaga extrañado.
-Sí, porque hablas en sueños y eso me dio lo pista, respondió Darío.
-¿Y cual es el mensaje?, pregunto Carol.
-El primero era onreibog led apluc se odot y noicaidar al rop rirom a siav por lo tanto es vais a morir por la radiación y todo es culpa del gobierno, dijo Darío.

Vaga y Carol se miraron con cara de sorprendidos, con la boca abierta.

-¿Radiación? ¿Gobierno?, pregunto Vaga.
-Joder, ¡qué coño esta pasando aquí!, dijo Carol enfadada.
-No tengo ni idea pero es algo gordo, dijo Darío.
-¿Y el segundo mensaje?, pregunto Carol
-El segundo era sieravlas so y olpmet narg le atsah ardeip ed onimac le riuges por lo tanto es seguir el camino de piedra hasta el gran templo y os salvareis, dijo Darío.

Los tres buscaron un camino de piedra y lo vieron un poco lejos de allí.

-Tenemos que seguirlo según el, a lo mejor quería ayudarnos y no hacerme daño, dijo Carol.
-Seguramente pero como hablaba así, dijo Darío.
-Pues entonces sigámoslo, no tenemos nada que perder ¿no?, dijo Vaga.
-Vale, dijeron Carol y Darío a la vez.

Carol, Darío y Vaga recogieron las cosas para seguir el camino de piedra, Vaga cogio una correa y se la puso a Flag, se dirigieron hasta el camino, al comenzar a andar sobre el apareció una persona enmascarada.

sábado, 31 de julio de 2010

Capítulo 4 - El motivo

Se levantaron por la mañana al notar los radiantes rayos de luz del Sol en la cara, tenían cara de no haber dormido bien pero Carol tenía distinta cara que los demás se la veía mas feliz que de costumbre, se fijo en Darío, le echo una mirada de arriba abajo fijándose en todo lo posible.

-¡Qué mono!, pensó Carol. Siguió mirándolo y cuando se dio la vuelta se fijo en su cara tenia unos ojos verdes esmeralda, un pelo que le llegaba hasta los hombros y cuerpo de un deportista, después miro a Vaga que era todo lo contrario ojos marrones, pelo corto, grasiento y con un cuerpo poco cuidado, luego volvió a centrar la vista en la cara de Darío mirándolo embobadamente y se fijo en que estaba manchado.

-Jajaja, Darío tienes manchada la cara de barro, dijo Carol riéndose.

Darío se toco la cara, noto entre sus manos el barro y busco algo con que limpiarse, saco un pañuelo, se limpio y lo guardo de nuevo en su bolsillo, seguidamente miro a Carol

-Oye que feliz estas tu, ¿no?, pregunto Darío.
-Sí, la verdad que no se muy bien porque pero me he levantado feliz, respondió Carol.
-Bueno vas a contarnos ¿Por qué estabas tan enfadada?, pregunto Vaga.
-A ver como os lo explico... creo que simplemente es envidia a vuestras vidas, dijo Carol.
-¿Envidia?, pregunto con cara de sorprendido Darío.
-Sí, porque los dos teníais mas o menos una vida que os iba bien y yo no tenía a nadie y eso me hacia estar enfadada, respondió Carol.
-¿Vida buena?, para ti es tener una vida buena estar en la calle pasando frío y hambre, dijo Vaga.
-No pero por lo menos la tuviste yo no tuve ni eso... siempre he estado marginada por así decirlo de la sociedad o así me sentía, dijo Carol entre lagrimas.

Darío fue hacia Carol, la abrazo cariñosamente tranquilizándola, Vaga mientras fue a buscar comida para su perro Flag y también para ellos, volvió con una botella de agua entre las manos, comida para ellos y para Flag.

-Tomad, las he encontrado tiradas por el suelo a lo mejor no es potable pero nos quitara la sed, dijo Vaga.
-OH, por fin agua tenía tanta sed, dijo Carol cogiendo la botella y dándole un trago.
-Gracias por traerlas Vaga, dijo Darío cogiendo la botella de Carol y dándole otro trago, al terminar de darlo se la paso a Vaga que se termino la botella y la guardo en el saco donde tenían todas las cosas que se encontraban y les podía resultar útiles en un futuro.

-Tenemos que continuar si nos quedamos estancados en un sitio seria peor, dijo Vaga.
-De acuerdo, dijo Carol.

Al terminar de conversar cogieron las cosas y siguieron si camino que parecía siempre el mismo solo cambiaban las formas de los escombros, los ruidos que se oían, los tres caminaban pegados para darse calor mutuamente porque hacia demasiado frío, Darío se freno en seco mirándolos.

-Será mejor que nos quedemos aquí y encontremos algo con lo que taparnos del frío porque sino moriremos congelados.

Cuando termino de decir eso Darío, Carol y Vaga comenzaron a buscar cerca de donde se habían parado una cueva o algo parecido pero no encontraron nada.

-Puff no hay cuevas por aquí cerca, dijo tristemente Carol.
-Entonces, ¿Qué hacemos?, pregunto Darío.
-Nada, mirar allí, dijo Vaga.

Vaga señalo una zona que había como un cuadrado abierto que tendría como mucho 2 metros cuadrados y las paredes tenían poca altura pero la suficiente para que les taparan si se sentaran, asíque se dirigieron los tres y Flag hacia ese sitio, al llegar allí se sentaron.

-Sigue haciendo frío, dijo Darío.
-Sí, vamos a acurrucarnos todos a ver si entramos en calor, dijo Vaga. Seguidamente se juntaron los tres que estaban tiritando.
-Aún hace frío, dijo Carol.
-Ya se, si ponemos lo que tenemos dentro del saco y el saco por donde entra el viento lo tapara y no pasaremos tanto frío, dijo Vaga. Al terminar de decir eso se levantaron los tres y pusieron las cosas donde había dicho Vaga.
-Ahora se esta muchísimo mejor que antes, dijo Carol.
-Exacto, vámonos a dormir, dijo Vaga.

Carol, Vaga y Flag se durmieron enseguida pero Darío tenia los ojos abiertos después de pasar un buen rato, moviéndose de un lado para otro.

-¿Qué nos quiso decir el loco?, pensó Darío.
-¿Realmente estaba loco o nos intentaba decir algo en otro idioma o código?, pensó inquietamente Darío.

Después de un largo tiempo pensado en lo que les quiso decir el loco se durmió... pero no estaban solamente ellos 3 y Flag, una calida mirada les estaba observando muy de cerca.

jueves, 29 de julio de 2010

Capítulo 3 - El loco

Carol, Darío y Vaga andaron hacia donde les había llevado la suerte.El paisaje era prácticamente el mismo pero cambiaban las ruinas de
formas, unas se podían comparar con casas otras con edificios y otras eran un amasijo de escombros.Por donde andaban esta vez parecía que
era suelo pero en muchas partes no había,sino que era barro.La temperatura había cambiado,hacia mucho más frío que antes.Al rato de andar
se pararon y se sentaron en unas rocas.

-¡Qué frío hace!, dijo Darío.
-Júralo..., dijo Carol bordemente.
-A ti, ¿Qué te pasa? no paras de contestar bordemente, de ponerte chula... no crees qué tendrías que estar de otra manera porque sinceramente
los tres y más gente como hemos visto antes están en la misma situación, dijo Darío.
-Mira... ¡¡¡dejarme en paz los dos!!! , al decir eso se fue corriendo.
-¿A dónde vas?, grito Vaga.
-Déjala ya volverá, hagamos una hoguera para entrar en calor, dijo Darío y acto seguido busco unos palos y piedras.
-Nos falta algo para prender fuego pero aquí va a ser difícil de encontrarlo, dijo Vaga.

Darío metió su mano al bolsillo,sacó un pañuelo de papel que tenía y se lo entregó a Vaga.

-¿De dónde has sacado esto?, pregunto interesado Vaga.
-Siempre tengo en el bolsillo por si me hace falta utilizarlos para algo, dijo sonriendo Darío.
-Nos viene fenomenal, dijo Vaga intentando hacer fuego.

Vaga intento hacer fuego pero no llego a conseguirlo entonces los dos se juntaron para darse calor.

-Oye todavía no ha vuelto Carol, ¿Crees qué se ha enfadado de verdad?, pregunto Darío.
-Supongo que no pero así son las mujeres, a lo mejor esta llorando o simplemente esta pensando, respondió Vaga.
-Yo creo que estaba pasando un mal momento en su vida antes de que pasara todo esto, dijo Darío.
-Podría ser pero tampoco es motivo para que nos responda así, ¿no crees?, pregunto Vaga.
-Sí, eso es cierto, pero la verdad que cuando alguien esta mal se puede reaccionar de distinta manera, dijo Darío.

Al terminar de decir eso se escucho un grito que provenía cerca de allí, los dos se levantaron y fueron a mirar por los alrededores.

-Creo que es Carol, dijo Vaga.
-Sin ninguna duda es ella, confirmo Darío.

No tardaron en ver la silueta de Carol y la de otra persona al lado gritando cosas extrañas, Carol tenia cara de asustada y nada mas
verles salio corriendo y se puso detrás de ellos.Los agarró mientras que ella temblaba,posiblemente de miedo hacía el hombre que estaba allí.

-¿Qué te ha hecho?, pregunto Vaga.
-Nada.Estaba sentada en el suelo y ha aparecido por detrás mía.Me tocó la espalda,me persiguió un poco y no paró de decirme
cosas raras, dijo Carol nerviosa.

Darío enfadado se acerco al loco y lo agarro furiosamente llegándo incluso a hacerle daño.

-¡¿Qué querías hacerle a Carol?! , pregunto Darío furiosamente.
-onreibog led apluc se odot y noicaidar al rop rirom a siav, dijo el loco.

Los tres se miraron con cara de extrañados pensando ¿Qué querrá decirnos?

-¿Qué quieres decirnos?, pregunto Carol.
-sieravlas so y olpmet narg le atsah ardeip ed onimac le riuges, dijo el loco yéndose corriendo hacia lo lejos.
-¡No! espera ¿qué nos quieres decir?, pregunto al viento Carol.
-Bueno ya da igual que se vaya, pero lo importante es que no te haya pasado nada, no te das cuenta que te podía haber hecho algo
¿Por qué te has ido?, pregunto de malas maneras
Darío.
-Volvamos a donde estábamos, dijo Carol cambiando de tema.

Carol, Vaga y Darío volvieron al sitio donde estaban antes de que ocurriera todo, se sentaron arrejuntandose para no pasar frío, Carol
les miro de frente a los dos y les dijo:

-¿Queréis que os cuente lo que me pasa? os lo contare...

lunes, 26 de julio de 2010

Capítulo 2 - La cueva

Era de noche y se escuchaban truenos, había tormenta y empezó a llover aunque no era agua pero tampoco lloviera radiactiva, Darío, Carol y el Vagabundo se escabulleron en una cueva que tenia muchas telarañas y por dentro tenia estalactitas y estalagmitas y se sentaron y empezaron a hablar.

-¿Sabes qué es lo que llueve?, pregunto Darío al vagabundo.
-Sí, son comedoras no se llaman así pero lo llamamos así porque nos come la piel a los humanos, respondió el vagabundo.
-A los humanos, ¿a qué te refieres con humanos?, pregunto Carol.
-Pues que hay "gente" por no llamarlos mutantes, que se han acostumbrado y la soportan como lluvia normal, le comento el vagabundo.
-Bueno y ¿Cómo te llamas?, pregunto Carol.
-Nunca lo digo, en parte porque no me gusta mi nombre y porque estoy acostumbrado a que me llamen Vaga, respondió Vaga.
-¿Vaga? por lo de vagabundo supongo, dijo Darío
-Sí, desde pequeño el gracioso de clase me llamo vagabundo porque tenía un pantalón roto y así me quede, y más tarde acabe siendo vagabundo de verdad, confirmo Vaga.
-¿Por qué acabaste siendo vagabundo?, preguntaron Carol y Darío interesados.
-Simplemente cosas de la vida, yo tenia amigos y gran familia y todo me iba bien pero un día una discusión me separaron de mis amigos, decían que el dinero me había cambiado cuando no era así, yo creo que tenían envidia, después el hermano de mi mujer pidió prestado a mi mujer dinero sin que yo me enterara y se lo gasto todo y no nos lo devolvió y mas tarde las facturas y todo se fue acumulando... mi mujer me dejo porque no tenía dinero y tuve que mudarme a otra casa mas pequeña donde no pude pagarle y en tres años me vi entre cartones y mi perro Flag, pero lo que realmente que dolió fue lo de mi mujer que solo me quiso por el dinero, dijo eso último entre lagrimas Vaga.

Carol estaba emocionada por la historia mientras que Darío le resultaba indiferente.

-¿Dónde trabajabas Vaga?, pregunto Darío.
-Tenía un bar y la gente el gustaba la comida, y la cosa fue creciendo y al final tenia muchos restaurantes, pero acabe sin ningunos aunque bueno según como estamos ahora no me servirían para nada, ¿Y vuestras vidas como eran?, pregunto Vaga.
-Yo trabaja en un restaurante también pero era camarero, tengo esposa y 2 hijos y vivía en un chalet alejado de la ciudad es un pueblo cuyo nombre no recuerdo..., dijo resoplando Darío.
-¿Sabes cual es el restaurante?, pregunto Vaga
-Tampoco, respondió Darío. - Y tú Carol, ¿Cómo era tu vida?, pregunto sin mucha gana Darío.
-Trabajaba en un banco, era la que decidía si daba créditos a la gente o no, dijo haciendo un bufido, y no tenia familia ni novio ni padres porque viví en un orfanato ni nada, solamente yo y dos amigos y amigas que tenía que los veía alguna vez que otra pero nada mas, dijo Carol.
-Bueno mejor cambiem..., de repente apareció del fondo de la cueva un oso furioso seguramente por la comida, fue hacia ellos y los tres se levantaron corriendo para salir fuera de la cueva...

-Se me ha caído algo, dijo con susto en el cuerpo Darío.
-Déjalo no creo que sea nada importante, ¡Corred!, dijo Carol.

Al salir fuera observaron que había terminado de llover y al parar de correr no sabían donde estaban, se sentaron a descansar mientras que intentaban respirar.

-Bueno algo de ejercicio nunca viene mal, dijo riéndose Darío.
-Pero no es lo mismo correr detrás de un balón o por otros motivos qué te persiga un oso, dijo Vaga con carcajadas incluidas.
-¿Dónde esta la gracia?, nos persigue un oso para matarnos, yo me he hecho daño en el tobillo porque he pisado mal y nos hemos llevado un susto de muerte, ¿y os reís?, valla par de inmaduros, dijo furiosa Carol.
-Valeee tranquila mujer si te parece nos ponemos a llorar, yo pienso que en estos momentos lo mejor seria reírnos o algo, ¿no creéis?, dijo Vaga.

Ninguno de los dos dijo nada, aunque en parte era normal en un abrir y cerrar los ojos habían perdido todo lo que tenían sin embargo Vaga había ganado algo nuevamente que era la "amistad" de Carol y Darío. Tumbados los tres en la noche veían el cielo donde solo se podían observar débiles destellos de lo que parecían era estrellas, aunque al rato de estar observándolas Vaga observo que algo se había movido en el cielo, sorprendió se levanto a despertar a Carol y Darío.

-Chicos chicos ¿habéis visto eso?, pregunto ansioso Vaga.
-¿El qué Vaga, no ves que estaba durmiendo?, le respondió Darío.
-Será una tontería déjame dormir, respondió bordemente Carol.
-Pues en el cielo estaba observando una estrella y se ha movido de un lado para otro la verdad no se como explicarlo pero ha sido así, dijo Vaga.
-A lo mejor estabas soñando Vaga, anda vete a dormir y mañana hablamos, dijo bostezando Darío.
-Vale, pero yo se perfectamente lo que he visto, dijo seriamente Vaga.

Vaga se tumbo cerro los ojos y se durmió pensando en lo que había visto en el cielo.

A la mañana siguiente se levanto el último Vaga y vio como estaba desayunando Carol y que había comida para el también.

-¿Dónde esta Darío?, pregunto Vaga.
-Esta por ahí perdido haciendo necesidades de la vida..., respondió bordemente Carol.
-Ati te pasa algo Carolina, ¿no?, pregunto confuso Vaga.
-¡No me llames Carolina! no me gusta, no me pasa nada, venga termina que tenemos que seguir.
-Vale... pero ati te pasa algo, con voz apagada dijo Vaga.

Volvió Darío con cosas en la mano y con la bragueta abierta.

-Mirar lo que he encontrado, dijo Darío, enseñando con la mano lo que parecía que era un cuchillo, una brújula y una cuerda.
-Súbete la bragueta lo primero, lo dijo entre risas, y después cogio la brújula, esta rota no nos sirve, dijo con voz triste Carol.
Darío se subió la bragueta, que pena bueno guarda todo en este saco que he encontrado a lo mejor nos sirve de algo en un futuro, dijo Darío. Carol lo metió dentro.
-Sigamos nuestro camino pero no sabemos donde esta el norte, asíque lo echaremos a suertes, dijo Carol.

Darío y Vaga afirmaron y lo hicieron al pito gorgorito y tomaron una ruta que estaba detrás de ellos y andaron en esa dirección al adentrase la tarde y con un saco que dentro guardaban las cosas que encontraban, y se iban turnando el saco para llevarlo y también iban acompañados por Flag.

domingo, 25 de julio de 2010

Capítulo 1 - ¿Dónde estoy?

Me desperté sin saber donde estaba, sentía entumecimiento en todo mi cuerpo, ¿Dónde estoy?, confuso me intente levantar pero al estar tan cansado no pude y caí rendido al suelo... empezó a llover y en mis mejillas note como cayeron gotas de algo que se parecía a lluvia, me intente volver a levantar y lo conseguí y al estar de pie abrí lo ojos y lo único que pude ver fue un mundo extraño, lleno de ruinas y todo estaba lleno de barro, ¿Estaba soñando?, lo único que me acordaba fue que estaba con mi familia cenando y me dormí al lado de mi esposa, comencé a andar pero no tenia fuerzas en las piernas y me caí al suelo y se me cerraron los ojos.

Me desperté ya estando recuperado pero lleno de heridas en todo mi cuerpo, lo que caía no era agua pero tampoco era lluvia radiactiva, ¿era una combinación?, me levante y comencé a andar por el barro que había para intentar hablar con alguien pero solo había una cosa que era clara que no era un sueño, era real tan real como las heridas que tengo en mi cuerpo, seguí andando horas y horas y no había nadie pero me fije en un bulto que estaba lejos y parecía una persona, fui corriendo y al llegar vi como era una mujer de cabello moreno que tendría unos 30 años de estatura media y la comencé a mover a ver si conseguía despertarla pero no lo conseguí, ¿Estaría muerta?, son todas preguntas que todavía no tienen respuesta que no se lo que hacer. Al caer la noche me ocurriré entre unos escombros que había y cene, si se puede llamar cenar a esto, un cacho de pan que encontré en el suelo y seguí buscando algo que llevarme a la boca y encontré un donut que tenia mala pinta pero era comida y al llevármelo a la boca...

-No te lo tomes, dijo una voz lejana.

Me fije y era la chico de antes, ¡No estaba muerta!, y vino hacia ami y cogio el donut y lo tiro.

-¿No te das cuenta que esta malo?, dijo la chica.
-Sí, pero no tengo nada mas que comer, respondió el chico e intento de nuevo llevarselo a al boca pero no le dejo la chica que lo piso.
-¡Qué haces!, enfadándose el chico.
-Mira ves esos dos chicos qué ahí allí, pues se tomaron algo que tenia esta pinta y están muertos, le replico la chica.
-Bueno... supongo que gracias, ¿Sabes dónde estamos?, pregunto el chico.
-Estamos en La Tierra, pero no se en que parte de ella, me desperté hará unos 4 días y supongo que estaremos en las mismas no te acuerdas de nada ni sabes porque estas aquí ni porque esta todo como esta, ¿verdad?
-Sí, estamos en las mismas, por cierto ¿Cómo te llamas?
-Me llamo Carol, ¿y usted?
-Tutéame por favor, me llamo... me llamo... no me acuerdo, ¡cómo puede ser que no me acuerde de eso!
-Busca en algún bolsillo, a lo mejor encuentras alguna placa con tu nombre yo la encontré.

Empezó a buscarla por su ropa y la encontró en la chaqueta.

-¿Qué pone?, pregunto Carol.
-Darío por delante y por atrás SADNS EXP. 0147, respondió Darío.
-En el mío también pone por detrás SADNS Exp. pero en vez de 0147 pone 0144.
-¿Sabes lo qué significa?, pregunto Darío.
-Ni idea...
-Voy a mirar en la chaqueta de las otras dos personas que hay, a ver si también lo tienen. Darío fue a mirarlo y encontró 3 placas, hay 3 placas con sus respectivos nombres y SADNS EXP. 0145, 0146 y 0112.
-¿Tres placas? Pero si solo son dos, bueno déjalas y sigamos caminando a ver si encontramos algo, dijo Carol.
-Ve andando que yo voy a orinar.
-Vale, pero no tardes mucho.

Siguieron su camino Darío y Carol pero solo se encontraban lo mismo una y otra vez ruinas y mas ruinas y cuando no eran ruinas barro o animales muertos en proceso de descomposición. Pasaron varios días y no encontraban a nadie, casi no comían ni bebían porque no encontraba apenas comida. Un día vieron a un hombre sentado en una roca con un perro, tenia pinta de vagabundo pero en ese preciso instante mas quisieran ellos tener los abrigos que el tenia.

-Hola, dijo Carol.
-Buenas noche, respondió el vagabundo
-¿Sabe donde estamos?, pregunto Darío.
-La verdad que no lo se a ciencia cierta... llevo varios días aquí con mi perro y comiendo lo que puedo.
-¿Sabe que significa SADNS EXP. 0147?, pregunto de nuevo Darío.
-Tampoco lo se, yo solo me limito a esperar, pero hace varios días pasaron 3 chicos diciendo que buscaban una cosa.
-¿Qué cosa? Un objeto, lugar, persona... hay mil cosas que podrían serlo, dijo Carol.
-Pero es que no especificaron, pero se una cosa les pregunte que donde estábamos y solo me dijeron que estábamos en Europa.
-¡En Europa!, gritaron Darío y Carol a la vez.
-Sí, en Europa, pero no dijeron en que país ni nada aunque como veis seria muy difícil de saber donde estamos con todo en ruinas.
-¿Y hacia dónde fueron?, pregunto Carol.
-Hacia el Norte.
-Gracias, ¿quiere acompañarnos?, pregunto Darío.
-No, me quedo aquí.
-Vale, que tengas suerte adiós...

Darío y Carol anidaron hacia el norte si sabes si era realmente el norte pero era por donde le había indicado el vagabundo, pero de repente...

-¡Esperar!
Darío y Carol se pararon, no decías ¿qué no venias?, pregunto Carol.
-Sí, pero he cambiado de opinión, mejor os acompañamos Flag y yo.
-De acuerdo, pues en marcha, dijo Carol.

Darío, Carol y el vagabundo siguieron en marcha en busca de más personas y de la "cosa" que buscaban... pero no solo buscaban la "cosa", sino también que significaba SADNS EXP. 0147, qué había pasado, porqué estaban allí, porqué estaba todo en ruinas, donde estaba su familia, amigos, etc... pero por lo menos ya sabían una cosa... que estaban en Europa.